El arte siempre fue algo muy presente en mi vida. Cuando era niña, el diseño, el ballet y la lectura, eran mi mayor pasión. Podía quedarme todo el día leyendo o diseñando, encantada y rendida, sin sentir el tiempo pasando, totalmente sumergida en el momento. Años más tarde comprendí que mis actividades tenían una calidad meditativa que me permitía alcanzar sensaciones tal vez un poco transcendentales. Por sensaciones transcendentales, es decir, la posibilidad efectiva de parar el flujo de fuera hacia adentro, "olvidar" lo externo y experimentar lo más interno, sin la interferencia del externo. La experiencia del interno, la quietud, soledad y silencio que me proporcionaban mis primeras actividades me llevaran por toda la vida hacia la búsqueda de mi misma, de mi propia verdad y del sentido de la vida.
La actividad física también ha sido siempre fundamental a mi equilibrio global y además del Ballet, pratiqué gimnasia, basquet y Tai Chi Chuan Taoista. Estudié Turismo y Diseño de Moda, y al lo largo de mi vida trabajé como Diseñadora de Moda, Controladora de Calidad y Gestora de Producción, secretaria, Booker, Ejecutiva de Cuentas y en Producción de backstage y Eventos de Moda.
En 2004 descubrí al Yoga. El descubrimiento del yoga fue un acaso y una pasión irresistible. Al acompañar una amiga a una clase, me encantó la posibilidad de una descubierta más profunda de mi. El hecho de obtener una percepción tal vez un poco diferente de mi y de lo que me estaba pasando entonces me llevó a la rutina más regular que había algún día respectado: Las clases de yoga. Después de la clase me sentía en armonía y en paz con todo, super tranquila y relajada, tan relajada que todo en mi entorno me parecía demasiado rápido y yo solo quería disfrutar de la paz y plenitud que sentía. El entendimiento básico de lo que necesitaba entonces, y que me fue regalado en la primera clase de Yoga, me dejó maravillada. Y esa clase fue tan solo el cumbre del iceberg y la motivación de seguir buscando aún más. La profesora, Liliana Nuño, me pilló con su tranquilidad. Desde ese momento hasta mí recién cambio de ciudad y país, seguí estudiando con ella. Liliana fue mi mayor inspiración en cuanto a la práctica del yoga, me enseño mucho y me acompaño a lo largo de todos los años que practiqué con ella. Liliana me enseñó Ashtanga Vinyasa Yoga, Iyengar Yoga y Yoga Dinámico. Su visión particular del yoga fue una inspiración, un regalo y una preciosidad en mi camino.
Desde 2004 que las ganas de aprender y experimentar aún más me llevarán a asistir cursos, talleres y practicas varias con diferentes profesores de prácticas diferentes. Yoga Dinámico (Método Godfrey Devereux), Meditación Budista, Maipayat Yoga, Medicina Ayurveda, Pilates, entre otros. Mi carácter profundamente autodidacta me ha igualmente llevado a través de un viaje profundo a variadas disciplinas que tratan de la vida.
En el año de 2007 decidí dejar a mi trabajo de ejecutiva de cuentas en una agencia de comunicación y dedicarme totalmente al yoga y a disfrutar a la vida. Desde entonces estudio apasionadamente no solo al yoga como a todos los temas esenciales a la vida humana, buscando y experimentando herramientas diversas y además del Yoga, para vivir una vida más sana y esencialmente más feliz y plena.
Imparto clases de yoga regularmente desde el año del 2008. Y estoy viviendo en Madrid desde 2010, en donde enseño no solo Yoga
